12 errores que cometen los invitados a un matrimonio
No basta agradar a los novios con la presencia, pues también es clave respetar ciertas pautas básicas de comportamiento. Aquí les contamos cuáles son las torpezas y desatinos que deben evitar si quieren ser unos invitados perfectos.
Por muy relajado o informal que sea el matrimonio al cual han sido invitados, existen normas protocolares que no se pueden saltar. Básicamente, se trata de una cuestión de respeto, educación y sentido común que, más que nunca, en esta ocasión no les puede fallar.
1. Llegar tarde
Si hay una ocasión especial a la cual por ningún motivo pueden llegar atrasados, ese es justamente un matrimonio. Ya sea una ceremonia civil o religiosa, es fundamental que sean puntuales o, de lo contrario, interrumpirán y distraerán con su llegada tanto a los novios como a los demás asistentes.
2. Que les suene el celular
No hay nada más desagradable que comience a sonar el teléfono en medio de un acto tan ceremonioso como un casamiento. Simple: apaguen o silencien el aparato móvil antes de que comience el rito nupcial.
3. No enviar regalo
Aunque parece absurdo, hay invitados que simplemente no mandan regalo. Más allá de las razones que haya detrás de esto, es muy desubicado asistir a un matrimonio con las manos vacías. Por eso, independiente de si es algo pequeñito o lo más barato que había en la lista, los novios agradecerán el gesto.
4. Llegar con un acompañante que no fue invitado
Qué actitud más de mal gusto. Nunca, pero nunca se les ocurra asistir a un matrimonio con una pareja que no fue invitada ya que, aparte de la desubicación, de seguro no tendrá puesto en la mesa.
5. No respetar el dress code
Si en el parte se ha consignado una etiqueta o look determinado para lucir ese día, es porque los novios así lo desean. Más allá de si les acomoda o no el dress code solicitado, deben cumplirlo y no llegar vestidos al matrimonio a su antojo.
6. Emborracharse durante la fiesta
Aunque está permitido beber alcohol más de la cuenta y por algo hay barra abierta en la mayoría de los casamientos, una cosa muy distinta es quedar totalmente ebrio y terminar dando un espectáculo vergonzoso. Y lo peor es que al día siguiente será tema de conversación y todos se acordarán del “borracho jugoso”.
7. Vestirse de blanco
Nunca está de más recordar este punto ya que, si la boda es en verano o por ejemplo en la playa, sería bastante apropiado utilizar ropa blanca o de un color similar como perla o champaña. Pero no, ¡está prohibido! El blanco queda reservado únicamente para la novia, así que no se les ocurra llevar un vestido de ese color ni otro parecido. Lo que menos querrán es incomodar a la festejada, así que olvídense del blanco por ese día.
8. Exigirle al DJ que cambie la música
Aunque no les guste lo que está sonando, no es llegar y pedirle al Dj que programa otras canciones que sean de su gusto. Recuerden que los novios previamente han elegido un set list especial para el matrimonio, por lo que son ellos quienes deciden sobre la música.
9. Hacerse el payaso
No faltan esos invitados “floreritos” que se hacen los graciosos y andan buscando la oportunidad para figurar. Está bien hacer un brindis por los novios, pero de ahí a no soltar más el micrófono, ponerse a cantar, contar chistes, llevar la coreografía y quizás qué otra cosa más, ya es demasiado fuera del protocolo.
10. Ir con los niños
Si en la invitación quedaba claro que el matrimonio era sin niños, llegar con ellos sería una clara falta de respeto y desatino. Por último, si no tienen con quien dejarlos, avísenles previamente a los novios a ver cómo logran resolverlo.
11. Pedir comida para llevar
Aunque sea una bandeja con canapés que quedó intacta, no comentan el error de pedir comida para llevar. Simplemente no lo hagan.
12. No confirmar la asistencia
Y por último, jamás lleguen a la boda previamente sin haber confirmado. De lo contrario, los novios asumirán su no asistencia y, por lo tanto, no estarán contabilizados dentro del seating plan ni de nada.