6 SÍ y 6 NO para su lista de invitados
La organización de un matrimonio involucra numerosos detalles, siendo la lista de invitados uno de los esenciales y más complicados, pues dependerá de ésta quiénes los acompañen en su gran día. ¡Tomen nota de las cosas que deben y no hacer!
Dentro de la organización, si la decoración de matrimonio puede ser más complicado de lo pensado en un principio, la lista de invitados, para la mayoría de los novios, puede convertirse en todo un desafío. ¿A cuántas personas invitar? ¿A quién por este lado, a quién por este otro? ¿Por qué sí? ¿Por qué no? La idea es llegar a un acuerdo como pareja para que esta tarea no los agobie y tampoco atrase en otras como escoger las copas de novios y, sobre todo, mandar a hacer las invitaciones. Recuerden que finalmente lo importante es que quienes los acompañen el día de su postura de anillos de matrimonio sean personas muy queridas por ustedes.
Los SÍ
1. Pensar en el presupuesto
Es fundamental hacerlo. Por muchos familiares o amigos que tengan, no podrán invitarlos a todos si no disponen de un presupuesto suficiente. Por eso, antes de comenzar a enumerar, evalúan el dinero del que disponen para celebrar su matrimonio. Les recomendamos utilizar la herramienta de presupuesto de nuestro portal. Con ella podrán organizar este ítem y controlar cada uno de sus gastos.
2. Saber transar
Tendrán que aprender a ceder con alguno que otro invitado, si es importante para ustedes. Y la realidad es que puede que no el 100% de los asistentes sean del total agrado de ambos, pero lo importante es que como pareja participen activamente de esta selección. Aunque no está de más recordarles que aunque tengan que ceder con ciertas personas, nunca inviten a alguien que los incomode y los haga pasar un mal rato en su matrimonio. Transar significa respetar los sentimientos del otro, no ceder porque sí.
3. Darse un gusto
Si por ahí tienen una persona especial, que no necesariamente pertenece a la familia o grupo de amigos, pero que sí es importante para ustedes que asista, no lo piensen dos veces e inclúyanla en el listado. Por ejemplo, un profesor de la Universidad que aun frecuentan o el cura que los va a casar, si es por la Iglesia.
4. Planificar con tiempo
Ya que seguramente le darán muchas vueltas y la lista sufrirá más de alguna modificación, lo mejor es comenzar esta tarea con tiempo. No la dejen para última hora o se les vendrá el matrimonio encima. Consideren que necesitan encargar la torta de matrimonio dependiendo el número de invitados y para qué hablar del orden de las mesas. Lo mejor es ser precavidos. Y si ya tienen casi listo el número de invitados, pero no saben cómo odenarlos en el salón, los invitamos a revisar esta didáctica herramienta de organizador de mesas de la web. Podrán hacer todos los movimientos necesarios y ver el resultado final. ¡Además, será como volver a jugar online!
5. Tachar nombres
Si definitivamente se están pasando del límite, sean racionales y no duden en eliminar a ciertas personas de la lista. Eso sí, comiencen por los parientes más lejanos. O, por ejemplo, no consideren al nuevo novio de su amiga con el que apenas lleva dos semanas saliendo.
6. Ser equitativos
Si compartirán los gastos por igual, como suele ocurrir, lo más justo es que ambos tengan la posibilidad de invitar a un número similar de personas. Lo esencial es que la balanza no se cargue demasiado para un lado ni para el otro.
Los NO
1. Pelear
Aunque la lista de invitados es uno de los ítems más complicados de armar, no por eso querrán terminar peleados. Para eso, dialoguen todo lo que sea necesario, pero siempre intentado mantener la calma.
2. Invitados por compromiso
Si piensan que deberían incluir a sus jefes o compañeros de trabajo únicamente para no quedar mal, se equivocan. Si no son personas cercanas, no las inviten y punto. Nadie tiene el derecho de reprocharles nada.
3. Los y las ex
Evítense un problema y, por muy buena relación que mantengan con ellos, no incluyan a sus ex parejas en la lista de invitados. Lo mejor es prescindir de su compañía por esta vez. Además, por mucha buena onda que haya puede incomodar a su pareja más de lo que imaginas.
4. Pedir muchos consejos
Si no quieren que nadie se meta, ni dar pie a que otros empiecen a opinar, ni se les ocurra comentar públicamente cómo va el listado. Aunque tengan dudas, lo ideal es no pedir consejos a terceras personas. Solo ustedes saben a quiénes quieren en su matrimonio.
5. Estresarse
Ante todo, disfruten de este proceso. Diviértanse en pareja conformando la lista y, por mucho que tengan que priorizar y excluir a ciertos familiares, no se dejen caer en el estrés. Recuerden que es solo un paso más de toda la lista de tareas que los esperan en su camino al altar. Y es importante que hagan de éste uno muy divertido.
6. Sobrepasar el límite
Aunque es cierto que más de algún familiar o amigo no podrá asistir, no deben usar este criterio ni darlo por hecho para agregar a la lista más personas, quizás no tan prioritarias. Y es que además de que cada asistente significa un costo, también deben preocuparse de no convidar a más personas de las puedan entrar cómodamente en el salón.
Planificar una boda puede ser estresante, pero si son ordenados y trabajan como equipo, se divertirán escogiendo desde las frases de amor para los partes hasta los centros de mesa de matrimonio que decorarán las mesas de sus invitados. Todo depende con qué ánimo realicen cada una de estas tareas.