¿Elegir el vestido de novia en pareja? Una pregunta que cada vez suena más
Si bien ambas opciones son válidas, hay varios puntos a considerar, tanto si querrás ir con tu pareja a elegir el vestido de novia, como si no. Resuelve todas tus dudas a continuación.
Aunque no es lo habitual y hasta hace un tiempo era inimaginable, lo cierto es que son cada vez más las novias que se inclinan por elegir el vestido acompañadas por la pareja. Principalmente, por cuestiones prácticas.
No obstante, a las más románticas y/o supersticiosas ni se les pasará por la cabeza esta idea. ¿Estás entre ambas opciones y no sabes qué hacer? Descubre en qué casos es una buena alternativa y en cuáles no, escoger tu outfit nupcial de la mano de tu prometido/a.
Por qué sí
1. Porque es tu mejor consejero/a
Tu pareja es la persona que saber ver lo mejor de ti -muchas veces cuando ni siquiera una es capaz de verlo-. Y quién más que esa persona que te conoce a la perfección y entiende tus gustos para aconsejarte en una elección que para ti es clave. Por lo tanto, a la hora de salir a buscar tu vestido, entre muchísimas posibilidades, sin duda que su opinión será un aporte. Su papel no será decirte cuál vestido comprar y cuál no, sino acompañarte en una etapa que puede convertirse en todo un desafío y mirarte con ojos de amor cuando estés apunto de tirar la toalla en la búsqueda. Así trabajarán en equipo y la tarea resultará mucho más fácil.
2. Porque disfrutarán la experiencia
Si son de esas parejas cómplices y muy unidas, que comparten amigos y pasatiempos, entonces también querrán compartir esta importante experiencia. Entre todo lo que implica organizar el matrimonio, uno de los ítems más emocionantes es, precisamente, elegir el vestido de novia. Por lo mismo, lo disfrutarán mucho más si lo hacen juntos.
3. Porque podrás prescindir de otra compañía
Si te complica tener que escoger entre tu madre, tu suegra, tu hermana, tus amigas o tus compañeras de trabajo, para que te acompañen a ver vestidos, ir con la pareja te simplificará el problema. Así no tendrás que estarte excusando, ni organizando grupos para salir a recorrer las tiendas. E incluso, contar con muchas opiniones diferentes tiende a confundir más que a ayudar.
4. Porque es posible mantener la sorpresa
Hay parejas que, aun acompañándose en este proceso, logran mantener la sorpresa. ¿De qué forma? Por ejemplo, puede que tu pareja te acompañe a las tiendas y te ayude a seleccionar modelos, pero no te vea con los vestidos puestos. O, que entre los dos definan tres vestidos, pero obviamente serás tú finalmente quien elija con cuál llegarás al altar. Sin decirle, por supuesto. Así igualmente lograrás sorprenderlo/a.
5. Porque podrán compatibilizar estilos
Por otra parte, si tu pareja te acompaña a elegir el vestido, le resultará mucho más fácil seleccionar su propio traje nupcial. O, si es que ya lo tiene definido, entonces te podrá entregar algunas claves para que ambos atuendos estén en sintonía. Ahora, si deseas un vestido que incorpore accesorios de color, en conjunto podrán definir cuál es el más indicado para que el novio/a también lo integre a su outfit. De este modo, se asegurarán de que los vestuarios combinen a la perfección.
Por qué no
1. Porque va contra la tradición
De acuerdo a una antigua costumbre, es un mal augurio que el novio vea a la novia con el vestido puesto antes del matrimonio. Así se conoce la tradición que viene de la Edad Media, aunque en realidad la historia es que el hombre no podía ver a la mujer de ninguna forma. Ello, pues el matrimonio era un arreglo económico y, a toda costa, se debía evitar que el novio se arrepintiera. Sea como sea, si son supersticiosos o, simplemente desean respetar la tradición, entonces no podrán ir juntos a elegir el traje.
2. Porque arruinará el first look
Por otro lado, si no tendrán sesión de fotos pre-boda ni trash the drees, pero sí una sesión first look (primera mirada), tampoco podrás permitir que tu prometido/a te acompañe a ver vestidos. El first look es una sesión fotográfica íntima, que se realiza poco antes de la ceremonia, cuyo objetivo es capturar, precisamente, sus emociones al verse vestidos de novios por primera vez.
3. Porque romperá la magia
Ya que en la organización nupcial trabajarán en conjunto, aun cuando se dividan las tareas, hay solo una cosa que podrás dejar al misterio: el vestido. Por lo tanto, si quieres sorprender a tu pareja y que sea en el altar donde le reveles tu traje, sé precavida hasta con dónde guardar tu vestuario. De lo contrario, se romperá esa magia que a muchas parejas les gusta conservar.
4. Porque no elegirás bien
Y por último, si tienes una pareja con poca paciencia o que no entiende mucho de moda, entonces llevarlo/a a elegir tu vestido no será una buena idea. Por un lado, te estará apurando o se cansará rápidamente de mirar vestidos y, por otro, no será un consejero a la altura. Quizás, para no darle más vueltas, te diga que te ves bien con un diseño, cuando en realidad podrías encontrar uno mucho mejor. O, tal vez, señale que te ves bien con todos y entonces te costará bastante más poder escoger.
¿Aclaraste tus dudas? Si es así, entonces no te queda más que salir a buscar el vestido soñado, ya sea con tu pareja o con quien decidas como tu mejor acompañante. Sea lo que sea que definas, lo importante es que disfrutes a concho este proceso.