Invitaciones para un matrimonio de verano
Dejen que la alegría del verano se impregne desde el primer momento. Si contraerán nupcias en la temporada estival, comiencen por enviar unas invitaciones que transmitan color y frescura.
La temporada veraniega sigue siendo la favorita para intercambiar anillos de matrimonio. Y es que no solo podrán usar un traje y vestido de novia más ligeros, sino que además celebrar un banquete al aire libre, en un ambiente relajado. Eso sí, tal como se ocuparán de elegir unas pizarras con frases de amor para la recepción, deben pensar también en la papelería. Especialmente en los partes de boda, que serán el primer acercamiento con sus invitados.
1. Colores y estampados
Más allá del tradicional papel blanco, atrévanse con invitaciones en tonos vibrantes como amarillo, verde limón, coral, fucsia o turquesa. Ya sea cartulina opalina, papel kraft, de fibra de algodón u otro, lo cierto es que unos partes de matrimonio a todo color lucirán mucho más veraniegos. Pueden elegirlos en un solo tono, o bien, seleccionar partes con estampados florales, que están muy de tendencia en estos días. Incluso, si buscan dar con un aire más tropical, al igual que en sus adornos de matrimonio, inclínense por estampados con palmeras, frutas de estación, loros, papagayos o flamencos. Por su parte, la técnica de la acuarela también funciona muy bien en partes de temporada estival.
2. Materiales
El verano invita a romper esquemas, así que no pierdan la oportunidad de usar materiales innovadores. ¿Por qué no enviar sus partes de boda en papel tornasol? ¿O utilizar un sobre con glitter? Ahora, si prefieren algo más elegante, las invitaciones clásicas siempre serán bienvenidas o si quieren darle un poco de color, los tonos pasteles vienen muy bien. O decántense por un papel batik multicolor, si son una pareja de inspiración boho-chic.
3. Aromas
Otra opción, si quieren impregnar de verano sus invitaciones, es aromatizarlas con alguna fragancia propia de esta estación, ya sea con perfumes frutales, cítricos o con esencia a brisa marina. Pueden inspirarse en el lugar donde contraerán nupcias. Por ejemplo, aromatizar con notas de coco o piña, si se casarán en la playa, o con toques de uva, si darán el “sí” en un viñedo. Y si acaso se inclinarán por una decoración para matrimonio campestre, entonces impregnen sus invitaciones con un perfume con aroma a lavanda, hierbabuena o jazmín.
4. Diseños
Ya que la creatividad no tiene límites, deleiten a sus invitados con unos partes veraniegos muy originales. Por ejemplo, en vez de usar el papel de forma rectangular, recórtenlo con el patrón de un helado de paleta y colóquenle un palito en el extremo inferior. No obstante, si prefieren una invitación en formato 3D, una estupenda idea es rellenar botellas con arena y conchitas, y poner en su interior un papel enrollado con las coordenadas del matrimonio. Ideal para postura de anillos de oro en la playa o en una zona costera. ¿Necesitan más ideas? Entonces reemplacen el tradicional parte por un abanico donde se incorpore toda la información o por un par de sandalias personalizadas con las coordenadas de la boda. ¡Qué más característico del verano que estos dos elementos!
Los partes de boda serán su carta de presentación, así que deben elegirlos pensando en que armonicen con la decoración para matrimonio. Pero no solo con los adornos, sino también con el resto de la papelería, ya sean las minutas o tarjetas de agradecimiento que preparen con frases cristianas de amor. Recuerden que ningún detalle puede quedar al azar.