Tutorial de maquillaje para labios rojos: ¿te atreves?
Como ningún otro, el labial de color rojo es la mezcla perfecta entre pasión, sensualidad, elegancia y glamur. Por lo tanto, ya seas la novia o invitada, seguro querrás aprender la técnica para conseguir un acabado perfecto.
Aunque el matiz dependerá básicamente del color de piel de quien lo porte, lo cierto es que el labial rojo se mantiene como favorito a través de los años. Ideal para contrastar la blancura de un vestido de novia, pero perfecto también para acoplarse a los diversos tonos y texturas de un vestido de fiesta. De hecho, logra resaltar las facciones y suma al rostro una dosis de vitalidad, tanto si lo llevas con un peinado recogido o con el pelo suelto.
Aunque una maquilladora profesional será la encargada de tu look nupcial, es importante que sepas cómo maquillar tus labios de rojo para que en plena fiesta sepas cómo mantenerlos, además de tener los cuidados previos para que el color dure mucho más.
Paso a paso
- Exfoliar: El primer paso para conseguir unos labios suaves y aterciopelados es exfoliaros. Por lo tanto, elabora un exfoliante natural con miel y azúcar moreno (puede ser otro), aplícalo en tus labios, remuévelo con la ayuda de un pincel y elimina con un algodón. Comprobarás que tus labios quedarán mucho más lisos, pues se habrán erradicado todas las células muertas.
- Hidratar: Para lograr un óptimo resultado con el maquillaje, también es necesario que tengas tus labios bien hidratados. Bastará, entonces, con que te apliques un poco de bálsamo labial, vaselina o la clásica manteca de cacao. Deja que el producto penetre durante unos minutos y luego retira el exceso suavemente con un pañuelo o toalla de papel.
- Aplicar prebase: A continuación, crea una prebase con un pincel difuminador con polvo compacto y un poco de corrector de ojeras. Aplica una capa casi invisible alrededor de los labios y otra sobre los labios mismos, lo que ayudará a que el pigmento natural de ellos desaparezca, quedando como un lienzo en blanco para maquillarlos. Con este truco, tus labios durarán más tiempo en perfecto estado. Precisamente lo que buscas si eres la novia y quieres llegar impecable a partir la torta de matrimonio, después de varias horas de celebración.
- Contornear: Tras ejecutar esos pasos preparatorios, estarás lista para la acción. Eso sí, antes tienes que elegir un lápiz para el contorno, que sea levemente más oscuro que el rojo de la barra labial que vas a llevar. Ya con el lápiz en mano, comienza a delinear los labios en pequeños trazos, poniendo especial énfasis en la V y siguiendo el contorno natural. Pero además de perfilarlos, aprovecha de rellenarlos, dando pequeños toques por el interior de cada labio. Así conseguirás que resista más el color que aplicarás a continuación y que el resultado sea homogéneo.
- Colorear: Llegado el instante de aplicar el producto estrella, busca un pincel plano y sumérgelo en el lápiz labial, si deseas que el trabajo sea más preciso y uniforme. Siempre tienes que aplicar el producto desde el centro del labio hacia afuera, extendiendo la cantidad justa y no pasándote. De esta manera, tus labios quedarán perfectamente coloreados de rojo, ideales para lucirlos con peinados sencillos o mucho más elaborados.
- Fijar y repasar: El paso siguiente consiste en tomar una borla y espolvorear sobre tus labios unos polvos compactos oil free para que el color se adhiera y dure más tiempo. Y una vez aplicados, vuelve a pasar el labial rojo con la ayuda del pincel plano. Tanto si eres la novia como una invitada a la postura de anillos de oro, será bueno que agregues a tu kit la barra y pincel por si debes retocar.
- Corregir: Finalmente, preocúpate de limpiar los bordes y corrige cualquier posible mancha con un hisopo de algodón. Además, si te parece que la capa del labial es demasiado gruesa, aplica una servilleta de papel en los labios durante unos segundos, la que absorberá todo el exceso.
- Remata con gloss (opcional): Este último paso es ideal para darle efecto de volumen a tus labios o para resaltar un maquillaje que acompañe a un peinado para fiestas de noche. Puedes usar gloss transparente sólo para dar brillo o uno del mismo color de tu labial, con el que lograrás un resultado full profesional.
Cómo escoger el tono adecuado
Según el color de tu piel y tipo de labios, te favorecerán más algunos matices del rojo que otros. Y es que en el mercado encontrarás diversas intensidades o acabados (mate o brillante), por lo que conviene tener claro cuál es la mejor opción para ti.
- Piel fría: Si tienes la piel clara o presentas un cutis con matices rosados o azulados, tu mejor elección será un labial rojo frambuesa o cereza.
- Piel cálida: Si eres más morena o tu piel tiende a una tonalidad amarillenta o dorada, tu labial ideal será un rojo de base anaranjada o amarronada.
- Labios gruesos: Si tienes los labios voluptuosos, los labiales rojo con acabado mate serán tus mejores aliados, pues resaltarán aún más tu cualidad.
- Labios finos: Si tienes los labios muy delgados, entonces te beneficiará un rojo de baja intensidad, como el tono salmón. También puede ser un gloss para destacarlos más.
Reglas de oro para usar labios rojos
- Haz que sean los protagonistas y que no compitan con otras partes de tu rostro.
- Combina tus labios rojos con unas pestañas marcadas, sombra tenue y unas cejas bien perfiladas. Lograrás el equilibrio perfecto.
- Evita las uñas rojas para labios rojos. Para no sobrecargar el color, idealmente opta por un tono de uñas más fresco u oscuro.
- Vuelven como tendencia los labios ultra brillantes, así que no le cierres la puerta a rematar con un gloss.
- Nunca te perfiles los labios con lápices diferentes al color de la barra.
- Para no resaltar las arrugas de tu rostro, sobre todo, las más cercanas a los labios, elige pintalabios en barra poco cremosas, ya que estos productos colorean sin escurrir o acumularse en los surcos alrededor de la boca.
Versátil como ninguno, el labial rojo se acopla perfectamente tanto a un traje de novia, como a un vestido de fiesta negro o de otro color. La clave es manejar bien la técnica y, por lo tanto, si tienes un intercambio de anillos de matrimonio a la vista -¡o el tuyo!-, no pierdas la oportunidad de lucir unos sensuales y glamurosos labios rojos.