Recuerdos y encitados de matrimonio

De acuerdo a nuestros expertos nupciales, lo ideal es comenzar a buscar y concretar la compra de los recuerditos uno 2 a 3 meses antes del matrimonio. Pero esto es muy variable dependiendo de lo que quieran regalar a sus invitados. No es lo mismo un recuerdo vivo como una suculenta, que uno comestible de bombones o galletas artesanales cuyos cuidados o caducidades pueden jugar en contra, que algo más decorativo que se pueda almacenar con mayor facilidad una vez recibido el pedido. De cualquier forma es algo que pueden consultar con cada proveedor para evaluar si están en el tiempo adecuado de solicitar para la fecha de su celebración.

Elegir un recuerdo que les represente como pareja es fundamental para sentir que ese detalle es el mejor. Las opciones son muy variadas, desde los tradicionales encintados en todos sus estilos, hasta los distintos modelos de abanicos, conservas, plantitas, llaveros, imanes o lo que se les ocurra. Hay quienes aprovechan momentos de la propia celebración para entregar un detalle ad-hoc, como los kit anti resaca, los pañuelos para lágrimas de felicidad o las pantuflas para el momento del baile, cuando los tacos resultan insoportables. Lo ideal es definir un presupuesto y evaluar si serán entregados de forma individual, por grupo familiar o por parejas. ¡Ah! Y no olviden etiquetarlos o presentarlos con algún detalle personalizado que deje claro que es un recordatorio de esa fecha tan especial.

En Chile lo más tradicional han sido siempre los encintados, esos pequeños arreglos envueltos con una cinta en la que se incluyen los nombres de los novios y la fecha del matrimonio o alguna frase romántica. Los hay de todos los estilos, como ramitos de flores, figuritas religiosas, velas de cera de abeja, frasquitos decorativos, detalles a crochet, saquitos de semillas, jabones artesanales o encintados dulces. Sin embargo, cada vez son más frecuentes otras variantes prácticas como abanicos, pantuflas, imanes o frascos en conserva, así como plantas, licores en miniatura o sombreros. Lo ideal es que los represente como pareja, recoja un poco el estilo o temática de su celebración y puedan personalizarlos a su gusto.

Hacer de cada recuerdito un detalle único, exclusivo y especial requiere de algo de dedicación. Una etiqueta con detalles en lettering, los nombres de cada invitado en cada recuerdo, frases de alguna canción que les represente, son solo algunas formas de hacerlas a su medida. Pero si hay alguien que les puede ayudar a conseguirlo esos son los más de 830 proveedores dedicados a crear los más sorprendentes recuerdos y a personalizarlos de acuerdo a sus preferencias.

La originalidad de un recuerdo en estos tiempos en que todo está tan globalizado puede estar en los detalles finales, en el tipo de presentación, en cómo armoniza ese regalo con el resto de la celebración o incluso en algo hecho por ustedes mismos. Déjense asesorar por los proveedores, vean sus catálogos y evalúen las recomendaciones de otras parejas y así podrán ir decantándose por aquel detalle que les haga vibrar a ustedes y sus invitados.