Lo máximo Claudio, Isidora, Cony, Sra María, María José... Todos los que estuvieron encargados de que ese día fuera el mejor y más esperado por nosotros. Después de un año, seguimos juntos para lograrlo. Increíble preparación, decoración, banquetería con comida exquisita. El lugar demasiado rico y campestre, justo como queríamos.
Se agradece mucho la dedicación y producción en cada detalle de parte de ellos. Nos sentimos muy cómodos.
Demasiado recomendado el lugar, DJ, decoración, banquetera.

Realizar nuestro matrimonio en Hacienda Santa Ana fue la mejor decisión que pudimos haber tomado. Si estuviéramos forzados a escoger un motivo, no nos queda ninguna duda de que sería la cercanía y sencillez que transmiten María Cristina y Claudio, y que se extiende a María José (decoradora), Eduardo (DJ) y Rodrigo (chef). Desde nuestra primera visita, nos dieron la confianza de que el resultado sería lo que buscábamos: una ceremonia y fiesta cercana, acogedora y sobria, pero que no por eso perdiera la elegancia y prestancia que este momento tan especial requiere.
Tuvimos reuniones de coordinación, María Cristina y Claudio en las que nos orientaron y para transmitirles lo que queríamos. Eduardo se encargó de coordinar la pauta y música (que el día del evento fue perfecta), y María José de entregarnos distintas alternativas de decoración. Confiamos 100% en ellos y el día del matrimonio todo funcionó tal como lo coordinamos: la decoración era maravillosa; el cóctel, variado y abundante; la comida, abundante y riquísima; los tragos deliciosos y variados; y la música (para lo cual Eduardo tuvo 100% libertad de acción), mantuvo a todos bailando toda la noche.
Todos nuestros invitados quedaron fascinados por el lugar, tanto de la ceremonia, cóctel y cena, porque había muchos rincones y espacios para compartir, todos decorados con mucho detalle y preocupación, dándole un toque especial al evento. También recibimos muchos elogios por la abundancia y calidad de la comida y tragos, así como por la atención de todo el personal.
Estamos super agradecidos de la confianza que nos entregaron María Cristina y Claudio, porque pudimos disfrutar del evento sin estar preocupados de ningún detalle. Si tuviéramos que elegir de nuevo, lo haríamos sin dudarlo en Hacienda Santa Ana. Lograron que nuestro matrimonio fuese realmente inolvidable para nosotros, nuestros familiares y amigos. Eternamente agradecidos.

Todo el equipo de Hacienda Santa Ana se preocupó cada minuto de que todo saliera perfecto. Claudio y Cristina son unas personas muy amorosas que con su organización hicieron que fuera el día perfecto.
Un lugar hermoso, absolutamente recomendado, todos nuestros invitados se fueron felices. La comida exquisita, decoración hermosa, el bar muy bueno, el DJ se preocupó de prender la fiesta toda la noche. No tuvimos que preocuparnos de nada y solo disfrutamos.
Estamos muy agradecidos.

Con mi esposa estuvimos varias semanas buscando proveedores para nuestro matrimonio, pero ninguno nos convencía, hasta que llegamos a Hacienda Santa Ana y conocimos a María Cristina y Claudio.
Desde un inicio fueron muy amables con nosotros y nos explicaron todo con mucha claridad y paciencia. Eso era lo que buscábamos, un hermoso centro de eventos a cargo de personas, que nos inspiraran una completa confianza para poder dejar en sus manos la organización del mejor día de nuestras vidas.
Claudio, María Cristina y María Jesús, la decoradora, tienen una disposición y amabilidad fantástica. Siempre pensaron en soluciones a nuestras ideas y nos apoyaron en todo momento. La ceremonia fue tal y como la habíamos planeado, el cocktail estuvo fabuloso y la ambientación también. María Jesús se lució decorando dos rincones que representan al país de mi esposa (Taiwán) y a Chile, todo el mundo se quería sacar fotos ahí.
La cena estuvo increíble, tal y como en la degustación. Después vino el baile y el DJ prendió a todo el mundo, él también tuvo muy buena predisposición. Nos juntamos previamente, le explicamos nuestros gustos musicales y nos entendió perfecto. En resumen un 10 de 10, Recomendadísimo.

Hacienda Santa Ana un gran equipo de trabajo, muy amables en el trato y al asesorarnos en todo lo que conlleva la organización. Siempre dispuestos a guiarnos en las decisiones, pero respetando lo que en realidad se desea en un día tan especial. Muy profesionales y todo funcionando como reloj, nuestros invitados quedaron felices, y no dejan de comentar lo bien que lo pasaron, la comida exquisita, el lugar hermoso, la atención espectacular, muy buen carrete en cuanto a música e iluminación, decoración de flores y arreglos todo con mucho detalle. Un día de sueño que no pudo ser más perfecto, estamos muy agradecidos en todo. Hasta se preocuparon de calmar nuestros nervios de novios. Gracias totales a Claudio, María Cristina, María José y Eduardo. Marce y Nacho.

Increíble servicio. Llegamos con la idea de arrendar un local para nuestro matrimonio y conseguimos mucho más. María Cristina, Claudio y su equipo se preocupan de todos los detalles y organizan varias reuniones para asegurarse de que todo saldrá impecable. Hacienda Santa Ana es un centro de eventos, pero también ofrecen una banquetería deliciosa y el mejor servicio de planeamiento que podrías imaginar.
Los recomendaría mil veces porque desde el día 1 se preocuparon de adaptar lo que ellos ofrecían a lo que nosotros queríamos y el día de la fiesta nos acompañaron de principio a fin para cumplir con los tiempos y que todo saliera como habíamos soñado.

Realmente hicieron de mi matrimonio una noche mágica, María Cristina, Claudio y el equipo completo de Hacienda Santa Ana me brindaron un servicio mejor de lo que esperaba, todo estuvo perfecto y mis invitados pasaron una noche increíble desde la comida y los postres, la decoración, música y el cordero en palo que todos los invitados disfrutaron. Si buscan un lugar para realizar tu matrimonio esta es la mejor opción. Se los recomiendo un 100%. Adicional ellos se encargaron de todo tuve cero preocupaciones previo a la boda, es muy fácil trabajar con ellos.

Estamos muy agradecidos de todo el equipo de la Hacienda Santa Ana, no solo porque nuestro evento fue muy bien planificado, sino porque se realizó en el día en que todo podía fallar: 19 de octubre, el día del primer toque de queda.
Somos una pareja de fotógrafos, así que observamos con mucho cuidado los detalles, siendo de vital importancia una buena iluminación en pista y un ambiente bien decorado. Estos dos puntos los tiene la Hacienda de todas maneras. Nos gustó mucho cómo está montado el lugar y el ambiente en los jardines e interiores es muy acogedor. La pista de baile y el equipo que tienen para iluminarla, es para enamorarse, porque es la clave para tener excelentes fotos y videos de fiesta.
Profesionalmente hemos visto de todo tras el escenario, por lo que el segundo factor clave era contar con un equipo que no solo se mostrara confiable cuando los vas a contratar, sino que lo sean en todo momento.
Por fortuna coincidimos como fotógrafos para un evento en la Hacienda durante febrero de este año, así pudimos ver cómo funcionaba el centro de eventos, sin ser nosotros los novios.
La primera impresión nos la dio María Cristina, con la que conversamos largamente durante una reunión de coordinación para el matrimonio en el que trabajamos. Muy amable y bien organizada. Todo lo relacionado al evento y a nuestra participación estuvo bien programado. Nos gustó esto porque significaba que cualquier show o servicio externo que contratásemos para nuestro matrimonio, sería bien recibido y se acoplaría de buena forma a nuestra celebración.
Lo anterior hizo que nos decidiéramos por la Hacienda y desde ese día estuvimos siempre preparando todo en conjunto. Claudio nos ayudó con datos de iglesias cercanas para celebrar nuestro matrimonio religioso y llegamos a una que no podía ser más perfecta para nosotros, con un jardín gigante en el frontis, una capilla acogedora y con una entrada de luz magnífica.
Teniendo la iglesia, luego preparamos la muestra decorativa y nos encantó poder elegir entre diferentes opciones para personalizar la decoración de las mesas. María José y María Cristina un encanto, con mucha paciencia y dedicación.
También tuvimos nuestra reunión con el Dj Eduardo y preparamos todo lo relacionado a la fiesta. Excelente disposición para orientar y dar consejos. La fiesta fue entretenida, con buena música y los efectos de luz en el momento indicado durante el baile que teníamos preparado. Esto fue muy importante para nosotros como fotógrafos, porque esos efectos están reflejados en nuestros registros audiovisuales.
Con respecto a la comida, elegimos el asado campestre, que a su vez, tiene diferentes opciones y combinaciones de agregados y ensaladas. Fue la mejor opción lejos, los invitados estaban felices y nuestros invitados y amigos cercanos con los que recogimos impresiones, dieron la misma evaluación: todo muy rico, variado y la atención del equipo de primer nivel.
Quiero destacar también la presencia de Claudio durante todo el evento, desde las horas previas (fuimos a instalar una cabina antes) hasta que terminamos nuestra celebración. Es importante que la persona con la que haces el trato, esté ahí para cualquier contingencia, y si nosotros podíamos tener una, fue la mayor de todas: el primer día de toque de queda.
Claudio siempre estuvo preocupado de que disfrutáramos nuestro matrimonio a pesar de lo que estaba pasando en Chile. No pudimos estar en un mejor lugar para recomponer el ánimo, la comida muy rica y como dicen ¨guatita llena, corazón contento¨. Entramos en una burbuja y agradecimos haberlos elegido, porque en los momentos de crisis, son los buenos equipo los que logran superarlas.
La Hacienda Santa Ana es más que un buen centro de eventos, es un excelente equipo de trabajo, cercano y preocupado por los detalles. Los recomiendo totalmente, por su entrega, profesionalismo y calidez.
Gracias de todo corazón, tenemos una historia que contaremos a nuestros hijos y en donde ustedes, marcaron la diferencia.

Muy buen servicio en atención y comidas, atentos a todos los detalles. Lugar muy agradable e ideal para cerca de 100 invitados.

¡Cristina, Claudio y María José se pasaron! Quedamos demasiados felices con como resultó todo. Fue una experiencia inolvidable, ya que desde el día que fuimos a visitar el local, hasta el día de nuestro matrimonio, todo fluyó perfectamente y tal como queríamos. ¡Nuestros invitados solo nos han dicho cosas sobre la comida, tragos y el lugar!
Eduardo, el DJ, también fue clave en que pudiéramos relajarnos, porque tienes una reunión con él, donde queda claro todo lo que queremos y durante la celebración también te ayuda a relajarte con su cuota de buen humor!
Cristina y Claudio te ayudarán en todo lo que puedan y te harán sentir muy cómodos con su buena onda y cariño!
Ahora solo nos queda esperar que alguien conocido nos invite a algún matrimonio en la Hacienda, ¡para ahora disfrutarla como invitados!

Felices, nos casaríamos nuevamente solo para celebrarlo en Hacienda Santa Ana, estuvieron desde el inicio muy preocupados de todo. Esa semana estuvimos preocupados por el toque de queda, por lo que Claudio personalmente habló con la jueza para adelantar la hora de la ceremonia y luego junto con María Cristina coordinaron con todos los proveedores los ajustes de horario necesarios. Agradecemos a todo el equipo, la comida, la música y la decoración hermosa que tuvimos en nuestro día.

Nosotros nos casamos el 9 de febrero del presente año en la Hacienda Santa Ana ubicada en la comuna de Talagante. Después de mucho recorrer, cotizar y buscar lo que siempre pensamos para ese día tan especial, optamos por La Hacienda; esto por varios motivos.

En primer lugar, es directamente atendida por sus dueños María y Claudio, quienes mantienen un contacto fluido y muy directo con los novios en todo momento. En segundo lugar, por ser un lugar hermoso, mágico y lleno de detalles que lo hacen el lugar perfecto. En tercer lugar, por los exquisitos platos que el chef nos presentó y, por último, por el compromiso de Julio, el DJ, quien mantiene varias reuniones para establecer justo lo que los novios desean hacer y escuchar en su matrimonio.

Fue una experiencia maravillosa. No nos arrepentimos en lo absoluto de haberlos elegido porque volvieron ese día uno de los más hermosos de nuestras vidas. La decoración, tanto del lugar como de la iglesia, fue exactamente lo que esperábamos y nuestros invitados quedaron felices y maravillados con todos los detalles, incluso aquellos alérgicos a ciertos alimentos o vegetarianos quienes tuvieron su trato especial.

Muchas gracias, Claudio y Maria, por todo, fue y será un día inolvidable.

Son un equipo fabuloso. Nos preparamos con anticipación y se cumplió todo lo que planificamos. Hubo algunas modificaciones de última hora, pero fueron cambios totalmente para mejor; nos sorprendieron con detalles que no estaban contemplados. Fue un deleite a la vista, los invitados encantados con el lugar, con la decoración; el cóctel delicioso y abundante, la cena variada y exquisita, los postres, ni hablar, arrasamos con todo; la fiesta un 10, el dj respondió al 100% a lo conversado. La planificación y coordinación de actividades impecable, excelente. Sólo reiterar los agradecimientos por su profesionalismo y gran nivel de producción.

Salió todo perfecto, la gente de la hacienda se preocupó de cada detalle y salió todo súper bien, disfrutamos al máximo nuestro día. Mención especial a Felipe Molina y Abigail que siempre estuvieron con mucha amabilidad y paciencia dispuestos a todo por nosotros. Toda la gente lo pasó súper, el lugar es bello, la comida rica, la decoración y todo lo demás perfecto. ¡Recomendado 100%!

Un lugar hermoso y con un equipo muy profesional, el día de nuestro matrimonio fue maravilloso, ellos siempre preocupados por todo lo que hizo que disfrutáramos con mi esposo a concho la fiesta, la comida muy rica y los postres exquisitos. Todos los invitados se fueron felices.