El matrimonio de Abraham y Daniela en Pucón, Cautín

Con los nervios de ese momento mi ahora esposo tenía las manos hinchadas y no podía poner su anillo y yo temblorosa de manos peor aún. Hasta la juez se tentó de risa porque fue una completa locura.

Luego de terminada la ceremonia empezaron los abrazos y las lágrimas porque hace menos de un año falleció mi hermana en accidente de auto y ese día mi hermano me abrazó y llorando dijo que nuestra hermana estaba ahí conmigo y eso me dejó paralizada y emocionada.

Además estaba mi abuela que se dedicó a criarme cuando mis padres decidieron dejarme para buscar otros rumbos, esto fue muy especial para mí porque tiene demencia senil y se le olvidan muchas cosas pero en ese momento estaba llorando emocionada porque su hija pequeña se estaba casando y eso marco nuestro momento.

Luego en el coctel nuestras familias aprovecharon de conocerse y de tomar fotografías en el lugar porque todo era completamente hermoso. Mientras tanto mi esposo en una escapadita terminó de colocar los nombres en la entrada del salón principal para la cena, y al término del cóctel nos sacaron las fotos con los invitados que fue toda una locura. Lo pasamos increíble, jamás me había reído tanto.

Terminamos las fotografías y nos tocaba hacer ingreso al salón principal para la cena. Estaba todo hermoso, las decoraciones eran muy minimalistas, pero todo bello. Quedaron todos nuestros invitados muy felices con la cena porque estaba todo delicioso. El resto de la noche fue todo muy divertido en especial el lanzamiento del ramo y la liga porque no habían muchos solteros pero los que estaban se los pelearon. Cabe destacar que esa noche conseguimos una hora más de fiesta por el cambio de horario y fue genial, lo pasamos fantástico, los dueños del local que contratamos se preocuparon de todos los detalles y nos hicieron sentir muy a gusto, fue una noche para no olvidar jamás, una completa velada de cuento de hadas.