El matrimonio de Carlos y Francisca en Tomé, Concepción
Otoño Rojo 3 profesionales
C&F
26 May, 2018La crónica de nuestro matrimonio
Desde que decidimos la fecha de matrimonio hasta el gran día, pasaron sólo tres meses.
Nos pusimos inmediatamente las pilas con las invitaciones de matrimonio porque es lo que más apresura cuando tienes poco tiempo, no quieres que ninguno de tus invitados no pueda asistir por cuestiones de agenda.
Los partes de matrimonio fueron un trabajo en familia. Partimos a la papelería a elegir texturas y colores y decidimos que sería rojo, de ahí en adelante fue el color que acompañó al blanco durante todo el proceso.
Las invitaciones fueron diseñadas, cortadas, impresas y envueltas en casa y quedaron hermosas, además que tuvieron el valor agregado del amor con que fueron creadas.
La decisión del lugar no fue tan complicada una vez conociendo los valores de las alternativas que hay en Tomé. Centro de Eventos Al Mar es un lugar demasiado bonito que tiene una vista privilegiada y además la dueña muy amable.
La banquetería fue tema de una semana. Pedimos diversas cotizaciones que nos ofrecieran opciones. Aquí nos pillamos con el primer shock en cuanto a opciones. Casi todos te piden que tú digas lo que quieres y no encontramos quien nos ofreciera variedad de servicios para ir agregando al evento. Hasta que nos topamos por casualidad con "Eventos Felipe" que nos envió distintas cotizaciones, ofreciendo diversos servicios. Maravillosa elección.
Seguir leyendo »Eventos Felipe nos preparó todo, y por supuesto nos alivianó muchísimo la carga con las tareas que hacer. Incluía Banquete, Mantelería, decoración, música, animador, cabina fotográfica, cotillón y hasta el show del Roboled. ¡Todo encantador! Dejamos en sus manos la ambientación, donde tampoco nos equivocamos porque nos dimos cuenta que, además, siempre está innovando con sus trabajos.
El día de ¡estaba todo listo! El ramo de novia me lo hizo mi mamá, ella me conoce mejor que nadie e hizo lo más hermoso que podía tener. Rosas blancas y Yerberas rojas. ¡Hermoso! (pueden pedirme el contacto también). La estilista fue Jenny Stylos (en Tomé Alto. Milade Asfura). Encantadora y muy profesional. Una persona con mucha paciencia y trabajo dedicado. El novio en casa del padrino se preparó rápidamente para esperar a su novia en el altar.
Nos casamos en la Parroquia Nuestra Señora de la Candelaria, en el centro de Tomé. La novia llegó tarde por supuesto. La verdad es que estuve lista antes de la hora, pero la madrina y mi mamá se atrasaron. Estaba histérica, así que, si les toca pronto su día, conversen la situación y pidan que estén listas antes de lo presupuestado en la iglesia.
La decoración en la iglesia fue un regalo de mi madre. Había una decoración hermosa realizada por Roberto Medel Wedding Planner. Fue para ambos una sorpresa maravillosa. La música estuvo a cargo de músicos de la orquesta de la Universidad de Concepción y quien se encargó del Ave María fue el tenor Cristian Salgado Espinoza.
Desde la entrada en adelante fue una boda de ensueños. El novio esperaba en el altar. Se veía precioso. Todo elegante y magníficamente feliz.
Nuestro Fotógrafo, Patricio Muñoz Magallanes, se encargó de dejarnos registro de todo lo que vivimos. Allí en la iglesia estaba la mayoría de nuestros invitados, expectantes de todo lo que sucedía.
Casados ante Dios, salimos tomaditos del brazo y para sorpresa nuestra: Nadie nos tiró ni un granito de arroz. La gente quedó pasmada dentro de la iglesia, con lo maravilloso de la decoración, la música que emocionó a todos y la felicidad que irradiábamos. Nadie nos esperó afuera.
Nos subimos al vehículo y paseamos por diversos lugares de Tomé. Hacía bastante frío, pero desde hacía dos horas que ya no llovía y no lo volvería a hacer hasta el día siguiente.
¡Llegamos al Centro de Eventos! Otra sorpresa, la gente estaba emocionada esperando para saludarnos, felicitarnos y entregarnos todo su cariño. Hicimos una entrada muy dulce con I don´t want to miss a thing de Aerosmith y todos los ojitos de nuestros seres queridos estaban puestos en nosotros. Hicimos un lindo brindis con copas personalizadas y grabadas con nuestros nombres, que finalmente se perdieron y bailamos el vals (que no era el que habíamos preparado), pero todo salió muy bien. De ahí en adelante todo fue disfrutar y ver disfrutar a nuestras familias y amigos.
No hubo tiempo para aburrirse, ni mucho menos tiempos muertos. El animador se encargó de amenizar toda la jornada e ir pasando al siguiente punto en cuanto correspondía. La comida muy buena, la fiesta excelente y nuestros corazones completamente llenos de felicidad y amor.
Servicios y Profesionales del Matrimonio de Carlos y Francisca
Otros Proveedores
Otros matrimonios en Concepción
Ver todas
Inspírate con estos matrimonios
Deja tu comentario