El matrimonio de Deborah y Javier en Curicó, Curicó

La crónica de nuestro matrimonio

Bueno, primero fue la ceremonia en el registro civil, en donde por el protocolo solo pudieron ingresar los dos testigos y obvio los novios, quedando afuera el fotógrafo, pero nos permitieron que ingresara nuestro hijo de 6 años. Fue una ceremonia bastante bonita, los dos estábamos nerviosos y expectantes, fue el mejor día de nuestras vidas. Luego de la ceremonia como tal fuimos a una plaza bien linda cerca del registro civil que está en Curicó y tuvimos una sesión de fotos con nuestros testigos e hijo.

Nosotros quisimos celebrar el matrimonio por la iglesia el mismo día, el cual se hizo después de la sesión de fotos de inmediato fuimos a la iglesia, donde tuvimos que sacar unos permisos especiales para poder ingresar a 10 personas de las cuales están incluidos los novios y el pastor que nos daría la bendición. Por tema protocolo covid-19, no se pueden ingresar a más personas por lo tanto tuvimos la idea de transmitir nuestra boda por vía Zoom a todos nuestros familiares y amigos, los cuales algunos estaban desde Valparaíso hasta la ciudad de la Florida en Estados Unidos. Fue una ceremonia bastante linda con emoción y felicidad, la pasamos excelente y nos sentimos cómodos.Al terminar la ceremonia con el pastor tuvimos un momento de brindis con nuestros invitados por las cámaras el cual todos desde sus casas brindaron con nosotros, fue algo excepcional, salió todo lindo gracias a la bendición de Dios.