El matrimonio de Gonzalo y Trinidad en Isla de Maipo, Talagante

La crónica de nuestro matrimonio

Fue todo maravilloso. ¡Ese día yo amanecí con cólicos de los puros nervios! Se pasó volando el tiempo, después de almuerzo llego mi maquilladora y estuvimos 3 horas en eso. Luego llegó y el fotógrafo y me hizo una pequeña sesión.

Camino a la iglesia estábamos todos nerviosos. Caminando ya hacia el altar es la parte que más provoca emoción, ver a mi novio ahí parado hermoso y alrededor todas nuestras familias y amigos es realmente lindo.

Tuvimos misa, fue precioso, palabras justas y precisas. Luego hicimos una sesión fotográfica en una viña, y después nos fuimos al lugar de nuestra celebración. Todo fue perfecto e inolvidable. Mucha comida, bebestible, la música y la decoración, el servicio impecable. Terminamos agotados pero muy, muy emocionados y felices por tanto amor, por tanta alegría.

¡Fue el día más feliz y especial de nuestras vidas!