El matrimonio de Jose y Cami en Quilicura, Santiago

Llegué a Casona San Ignacio (donde fue la ceremonia, cóctel, almuerzo y fiesta. Recomiendo 100 % hacer todo en el mismo lugar si es posible) y estaban todos nuestros amigos, familiares, toda la gente que nos quiere, esperándome. Un coro maravilloso con violín tocando una canción y al final del altar mi novio (que cuando me vio se emocionó, ¡mejor momento del matrimonio!). La ceremonia religiosa fue muy personalizada y emotiva gracias al cura que elegimos.

Terminada la ceremonia los invitados rápidamente pasaron al cóctel, donde había una sorpresa. ¡Nos habíamos ganado el Candy Bar de Ambrosoli! ¡Muy lindo el carrito! ¡Todos los invitados se llevaron bolsitas con dulces! En el intertanto nos sacamos las fotos protocolares con nuestras familias.

¡El almuerzo estuvo exquisito! Nada que decir de la comida, decoración y servicio de la banquetera.

Y finalmente llegamos a la parte que todos los invitados llevaban casi 2 años esperando ja, ja, ¡La fiesta! Pero antes venía el vals, que lo preparamos junto a Elephant Color. Primero bailamos solos una canción que nos encanta de la película La La Land y después entraron nuestros papás para un pequeño vals.

Para complementar todo tuvimos la cabina Boombox (un acierto porque los invitados la disfrutaron a concho de principio a fin) y por supuesto un show de Elephant de la Máscara. ¡Participamos en el show y fue lo mejor! ¡Muy entretenido e inesperado para los invitados!

¡Estamos demasiado felices en como salió todo! Nuestros invitados quedaron emocionados y bailaron hasta que se terminó la fiesta. ¡No podríamos haber pedido más de este día!