El matrimonio de Jovanna y Ignacio en Collipulli, Malleco

La crónica de nuestro matrimonio

Fue un día de locos, el día anterior mi esposa pendiente de la decoración que estuvo a cargo de Doris Cancino, pero mi esposa le gusta revisar cada detalle y se fue a descansar muy tarde. El día del matrimonio la cena fue hecha por nosotros y tuvimos mucha ayuda. El coctel lo mandamos hacer a Lisbeth Vargas, entre las miradas de mis suegros que no se llevan bien, entre corriendo por la hora, ir a peinarse y todo se sintió una emoción muy bella, aunque ya llevábamos 10 años como pareja y 9 años viviendo juntos, este era un paso muy importante en nuestras vidas ya que nos casamos por iglesia y (civil unos días antes). Llegó la hora, todos a la Iglesia, entra mi esposa bella radiante del brazo de su papá, en la iglesia las personas que nos quieren y todo se volvió una emoción. En la ceremonia nos casamos, nuestras hijas muy contentas y ahora a celebrar. Empezamos a dar la tradicional vuelta en el auto cantando una canción que nos gusta mucho y fuimos al cementerio a dejarle unas flores del ramo a mi papá que no está con nosotros. Sacamos fotos y ya a las 6:30 llegamos al coctel, fue emocionante como todos, a pesar de tener garzones, estuvieron pendientes de si hacía falta algo. Celebramos, luego en la cena dieron lindos discursos llenos de amor hacia nosotros, juegos de parte de nuestro DJ y animador Freddy Ravanal, tradicionales lanzar el ramo, el guante, la liga y el ramo de solteras con dijes, una noche inolvidable. Nos dieron las 6 de la mañana celebrando y felices, cansados nos fuimos a la noche de bodas. No tuvimos luna de miel, no dieron los recursos y aparte queríamos poder ir a unas termas ya que ninguno había ido nunca, pero llegó la pandemia y tampoco se pudo. Bueno es así como nos casamos y seguimos siendo felices junto a nuestras hijas.