El matrimonio de Lesly y Ivan en Quilpué, Valparaíso

La crónica de nuestro matrimonio

Bueno demás está decir que fue un día lleno de errores.

Creo que lo que más me hizo sudar fue el vestido, el cierre se reventó 5 minutos antes de tener que irme, por suerte pudo coserse sin problemas.

Pero lo que realmente me tuvo con el corazón en la garganta fue el llegar al local en el que se realizaría nuestra boda y que aún no encontraran a la jueza. Yo entre mis pensamientos y a cada minuto que pasaba, decía: ¡no me voy a poder casar! Entre una lágrima que ya se me caía allí dentro del auto esperando; cuando al fin el llamado que nos dice que apareció la señora y sin dar ninguna excusa y como si nada luego de 30 minutos de retraso, bueno fuera de que hasta mi maquilladora llegó tarde y mi peinado no quedó como lo quería, que la niña encargada de la torta se le quedara un piso, o las desubicadeces de mi suegra en el vals tratando de quitar al novio, a pesar de todo, salió todo hermoso...

Sin duda los sentimientos que tuve al ver a mi esposo ahí esperándome son indescriptibles, cada momento fue maravilloso junto a él. Es por eso que a todas las novias que estén en proceso de esta hermosa etapa, les digo que no se angustien tanto por las cosas, al final sale todo bien siempre, y que lo principal es disfrutar de cada momento ya que no se volverán a repetir.