El matrimonio de Renato y Viviana en Temuco, Cautín
Elegantes Verano Naranja 1 profesionales
R&V
14 Mar, 2014La crónica de nuestro matrimonio
Cuando Renato David Monsalve Tager, después de pedir mi mano a mis padres en una cena familiar con ambas familias, entregando una argolla hermosa de compromiso, pasaron tan solo 3 meses de novios y nos casamos.
Desde ese entonces fue de locos, emociones extremas llantos de alegría y de impotencia al enfrentar situaciones que no se pueden evitar por más que uno quiera tener todo bajo control .
El civil se realizó al aire libre en una parcela donde hay quincho, Loncoche.
El Religioso se realizó en la Iglesia del Señor, Caupolicán, Temuco hermoso templo y amplio para varios invitados, luego se realizó la cena y fiesta en las afuera de Temuco, camino al aeropuerto en "Paladar y Copa" con "Tortas evento Loncoche".
Todo se organizó con tres meses anticipado. Cuesta encontrar el vestido elegido, pero con mi hermana y prima lo encontramos, es una emoción tan grande de mirarte y decir, sí este es, luego buscar los zapatos y la tiara perfectos.
El día del gran evento es muy estresante pero hermoso, muy hermoso, aun cuando tienes gente que realiza tu evento con gran preocupación y detalles, siempre uno quiere ver como están las cosas, por lo menos con mi esposo pasó y anduvimos en el centro de evento, en el templo, en el hotel, donde nos quedamos para pasar la noche de boda y cuando ves la hora ya tienes que estar lista y hay que separarse por un tiempo con el novio y correr contra la hora. Mi peluquera en el hotel me preparó y mi hermana mayor me prepararon también. Estaba el fotógrafo y fue cuando me di cuenta que no tenía mi tiara.
Seguir leyendo »Una de las anécdotas, no tenía la tiara que había comprado con mucha anticipación, se me había quedado en Loncoche y ya no había nada que hacer y comencé a llorar y todos trataban de contenerme. Llamé a mi esposo, le conté y le dije, no me voy a casar si no tengo una tiara. Pueden pensar que soy una persona muy superficial, pero algo pasó. El dejó una tiara en recepción para que me la entregaran, la que consiguió cuando iba camino a la iglesia, mi celular llamaba, el pastor, mi mamá, por que mi suegra estaba muy nerviosa, porque todos estaban esperando. Cuando me pusieron la tiara me retocaron y sentí que un aire frio recorrió mi cuerpo y entonces dije "me voy a casar para siempre", respiré. Mi papá estaba listo para llevarme al auto y salimos, nunca olvidaré cuando llegamos y al subir las escaleras comenzó la marcha nupcial tocada en vivo en viola y flauta traversa, fue increíble, sonreía y quería llorar de alegría, de emoción. Entró el novio y su mamá, luego las damas de honor y los amigos del novio y yo con papá y los pajes. Todos miraban y tenían rostros de emoción, al llegar al altar nos miramos con mi esposo sonreímos y supimos que seríamos una hermosa familia con la bendición de Dios. Lo pasamos muy bien, nos olvidamos de todo lo que nos tocó pasar en febrero antes de casarnos mientras preparábamos el matrimonio. Difícil diagnóstico de salud que hasta hoy debemos seguir fortaleciéndonos, pero ahora lo hacemos como marido y mujer, hoy pensando también en nuestro tesoro que viene en camino. No importa lo que pueda suceder antes o durante el matrimonio, hay que superar y gozar del día más maravilloso donde comienza nuestras vidas nuevas, ahora como uno.
Servicios y Profesionales del Matrimonio de Renato y Viviana
Otros matrimonios en Cautín
Ver todas
Hotel Frontera
Parcela de la Barra
Parcela de la Barra
Inspírate con estos matrimonios
1 comentario
Deja tu comentario