El matrimonio de Sebastián y Viviana en Arica, Arica

La crónica de nuestro matrimonio

Bueno, había escrito una linda crónica desde un PC pero se cerró la página y perdí todos los avances. Ahora solo me queda decir que a casi 2 meses desde mi matrimonio, lo recuerdo como si fuera ayer. Me preocupé de guardar y atesorar cada momento y cada detalle, ya que no se repetirá. En verdad que para mí fue maravilloso, no cambiaría nada a pesar que surgieron inconvenientes de último momento pero que se resolvieron sin la necesidad de ponerme nerviosa o histérica.

Finalmente, no me arrepiento del dinero invertido que nunca nos sobró pero tampoco faltó porque ver la felicidad de las familias, amigos y en especial de mi ahora esposo me deja feliz. No tengo palabras para describir la emoción de ese día pero ciertamente que si pudiera retroceder el tiempo aprovecharía al máximo de todo. El único detalle que debo mencionar como algo negativo es que la torta llegó mientras nos estaban casando. Hablé con el pastelero al día siguiente y ni siquiera me pidió disculpas además no era el sabor que habíamos escogido y me dejó en claro que él no había participado en la elaboración de la torta. Ese fue un punto negro pero quedó atrás. Lo más importante es que disfrutamos y las emociones vividas las tengo aún a flor de piel.