El matrimonio de Víctor y Maribel en Antofagasta, Antofagasta

La crónica de nuestro matrimonio

Nos casamos por el civil el día 15 de abril. Luego de la ceremonia fuimos a tomar un desayuno en familia, de allí empezó el ajetreo este día y a descansar para despertar radiante. El sábado me levanté temprano o relativamente temprano tipo 10 am y fuimos a buscar mi ramo y flores. Después trasladamos las cosas al local y me vio el fotógrafo me dijo ¿tú que haces aquí? Lo siento, pero no pude evitar de ver que todo resultara bien. Me fui a alistar, ya estaba mi maquilladora esperándome, entonces me empezó a preparar para maquillarme y esperar que llegará mi amiga para vestirse conmigo. Estaba mi abuela ayudándome en todo y mi hermosa hija. Llegaron mis amigas y me pusieron el vestido, fue toda una aventura entrar en mi vestido corte sirena.

Me ayudaron a vestirme y mi abueli me pusó los zapatos, me maquillaron y peinaron entonces llegaron unos primos que llevarían a mi abueli e hija a la iglesia, el novio no llegaba y tenía que vestirse, me asusté mucho y puse más nerviosa, pero llegó. Claro que no se pudo cambiar en nuestro departamento, por eso de no ver a la novia, así que se vistió en el departamento de la vecina, bueno eso fue un momento adrenalínico. Luego se fueron mis primos camino a la iglesia y mi chofer estaba esperando abajo. Todo pasó tan rápido que no me di cuenta cuando ya me estaba subiendo al auto, tipo el padrino, digno de película, tal como nuestra boda. Ya faltando 15 minutos para la boda. Recién salíamos del condominio y todas las vecinas salieron a saludar y desear éxito, me sentí muy especial. Camino a la iglesia junto a mi papi estaba nerviosa, pero todo pasó cuando llegamos a tiempo. Estaban mis damas de honor formadas para entrar y la corte, claro al final de ella el novio nervioso desde lejos lo pude ver. Cuando me dieron la señal, el auto llegó al arco de flores desde donde comenzaría a caminar al altar, sonaba "Thousand year" y mi esposo me esperaba en el altar mientras caminaba hacia él. Fue maravilloso ver a nuestra familia y amigos dentro de la iglesia.